Un receptor y un transmisor de control remoto forman un sistema inalámbrico que permite la operación remota de dispositivos como motores, puertas o cortinas. El transmisor (mando a distancia manual, interruptor de pared) envía señales de radiofrecuencia (RF) o infrarrojas (IR), mientras que el receptor (conectado al dispositivo) decodifica estas señales y activa la acción deseada (por ejemplo, abrir una puerta, mover una cortina). Este sistema elimina la necesidad de operación manual, mejorando la comodidad. Entre las características clave se encuentran los códigos seguros variables (para sistemas RF) que evitan la interceptación de señales, comunicación de largo alcance (hasta 100 metros para RF) y múltiples canales para controlar varios dispositivos con un solo transmisor. Los sistemas IR requieren visión directa pero son ideales para usos de corto alcance en interiores (por ejemplo, mandos a distancia para televisores), mientras que los sistemas RF funcionan a través de paredes/obstáculos. Nuestros conjuntos de receptores y transmisores de control remoto son fáciles de emparejar, con instrucciones claras para su programación. Son compatibles con diversos motores y dispositivos, con diseños duraderos para uso prolongado. Para consultas sobre compatibilidad de frecuencias, alcance o problemas técnicos con las señales, contacte con nuestro equipo de ventas.